15 de marzo de 2013

PARA TI











Tengo la memoria clara
con muros de anhelos,
solo a mí, tu figura eriges,
entre letras y canciones
tu pensamiento de hombre,
en papel blanco y lienzo virgen
escribes y pintas tus íntimos
sentires,
tu sutileza viaja empapando
el alma, albergándose
con dulce calma.
Despacio derramas tu vino,
calmando mis ansias;
de tu mano bebo el cáliz,
todas las mañanas,
en la orilla callada 
de esta distancia.

8 de marzo de 2013

MUJER HERMOSA













¡Niña!
¡Niña, oh no!
¡Varón quería!
Se escucha en la sala
de espera de un hospital,
de cualquier ciudad.

La que al nacer
ignorando el desprecio,
arrulla con sus tiernas manos,
enternece con dulce sonrisa;
acaricia el alma con un te amo.

Descendiente de Eva
culpable o inocente,
pecadora o santa,
puta para las envidiosas,
fiel y sincera para las amigas.

Poseedora de diamantinas
manos constructoras;
decidida y emprendedora,
volcánica, pasiva,
impulsiva luego arrepentida
loca romántica,
absoluta, sumisa.

Flor del bien y la alegría
ojos de espiritual  belleza,
manojo de versos, poesía inédita;
alma luminosa de día y noche,
canción distante de algún galán errante.

Cuando lejos esta,
sangra la emoción roja,
su recuerdo deambula en  los
corazones vacios.

Abnegada vehemente
su amor insondable,
inmenso como el cielo,
da pan y tranquiliza al
hambriento, vino al sediento,
Ungüentos perfumados
derrama en la coronilla,
de sus  seres amados.

Su calvario disimula detrás de
tímidas sonrisas,
arduas sus horas, en las sombras
de sus penas,
trabaja extra por unas cuantas monedas.

En el canapé languidece
su ilusión de mujer,
de pie, como roble,
es  madre y padre a la vez,
a falta de hombre a su lado.

Campesina  ama de casa,
estudiante o ejecutiva.
En muchas funciones siempre están,
Como sea entregando su vida
a los suyos.

Madre, hija, hermana, esposa…

Por la que dijeron,
¡Niña no! Al  nacer
Para ella estas letras.
Hermosa mujer.


Pintor: Ron Di Scenza









24 de febrero de 2013

OTRA OPORTUNIDAD






Memoria difusa
sin conciencia sin razón
minutos incesantes de agonía,
vendaval de sombras negras
se agolpan retorciendo la existencia,
en vilo el alma y espíritu.
Tiembla la carne al presentir el
desprendimiento de estos,
sacuden el cuerpo demonios desconocidos,
la impotencia señorea en conflagración
con la muerte vagamente, torpemente;
cansada una evocación sagrada normaliza
los latidos acentuando el ritmo cardiaco,
volviendo la luz aun con los ojos cerrados.















12 de febrero de 2013

ENTRE LETRAS Y SILENCIO












Escribiendo rimas, versos en las sombras

inventando alegrías,

renaciendo en la letra franca de la poesía;

taladra el sentido una voz lejana,

que se agudiza incrustándose en el espíritu,

volátiles deseos colgados en la ventana de

cada amanecer.

Hurgando a furtivas un hilo de luz que avive

el alma liberando suspiros,

y con ellos trozos de vida, inmortalizando en

papel y tinta negra un amor distante,

queriendo sujetar el tiempo;

verdugo sin misericordia, carente de ancla,

en torbellino rueda el anhelo abriéndose como

capullo en la alborada.

vaga la mirada por calles desconocidas, buscando

un signo leve de esperanza,

atravesando mares de peces alados;

en un rincón, al otro lado, la sutileza de la palabra

sincera sustenta el existir,

en el egoísta silencio de la nada.