En la fresca mañana,
gritándole al mundo
pasa,
con alas cantoras
adheridas al viento,
suspendido en el cielo
exhibe su singular
belleza;
con destreza entre
álamos
vuela vertiginoso de
norte a sur.
Dejando su plumífera
estela temblando en el
aire celeste.
Pájaro impávido con
pecho
verde esperanza.
Desafiando las
corrientes,
vaga palpitando en el
tiempo.
Cantando en el alba,
vestido de libertad
entre las
ramas de los árboles,
deja su huella de alegría,
al empezar a caer el día
en algarabia busca su
nido.